Día 8:
Desayuno. Salida hacia Inverness, la capital de las Highlands, centro comercial y administrativo, situada a orillas del río Ness. Tendremos tiempo libre para pasear por la ciudad. Si lo deseas, podrás unirte a la visita opcional para conocer el castillo de Urquhart y el Lago Ness, tal vez el motivo de tu visita a Escocia. En ella daremos un tranquilo paseo en barco por el lago Ness (Loch Ness en escocés), que nos regalará una perspectiva mágica de este lago de aguas misteriosas. Llegaremos hasta el Castillo de Urquhart, que se encuentra sobre un promontorio a la orilla del lago, lugar ideal para ver a Nessie, el legendario monstruo. Regreso a Inverness y tiempo libre. Luego, nos dirigiremos a Edimburgo, capital de Escocia, llamada la “Atenas del norte”, Patrimonio de la Humanidad y sin duda una de las ciudades más bellas de Europa. Por el camino podremos ver el emblemático puente de hierro sobre la ría del Forth, declarado recientemente Patrimonio de la Humanidad. Para conocer esta interesante ciudad, realizaremos una visita panorámica con guía local. La capital escocesa cuenta con muchos atractivos para el viajero: la zona medieval vertebrada entorno a la Milla Real, la distancia que separa el Castillo donde se fundó la ciudad y el Palacio de Holyrood, sede del Parlamento escocés; los famosos Closed, en la ciudad nueva, un fantástico conjunto arquitectónico de estilo Georgiano; encontramos las clásicas plazas circulares con sus jardines privados; y desde las colinas podremos descubrir bellísimas panorámicas sobre la ciudad y la ría del Forth; Calton Hill, que además está salpicada de edificios clasicistas, construidos para conmemorar victorias sobre Napoleón. Resto de la tarde libre y traslado al hotel. Cena y alojamiento.